sábado, 4 de junio de 2011

Juntar fuerzas

Es sabado por la noche y del otro lado del telefóno Sandra habla con angustia, quiere saber como puede ayudar a su hermano indocumentado a lograr acceder a su DNI.

Pide disculpas por la hora, pero trabaja de noche y en la semana le es imposible llamar. Con bronca cuenta como un abogado al cual le entregaron el caso no inició aún la causa, pese a cobrar anticipadamente honorarios.

Su hermano me explica, tiene veinte años y en su barrio en Isidro Casanova hay "un montón" de pibes que como él carecen de un documento de identidad.

El día anterior, en Casa de Galilea el Poyo Salvatierra trajo a un chico de 18 años de San Martín, también indocumentado, que considera imposible acceder a su DNI y juega al futbol en una liga municipal con el documento de un amigo, ya que de otra forma no lo dejarían participar.

Ese mismo día, unas horas antes, dos hermanos de la misma edad y la misma ciudad, luego de buscar en la web, se habían acercado a consultarnos sobre que pasos deberían dar para lograr su documento. Días antes conocí a R, madre de ocho hijos indocumentados y adicta a las drogas. Su relato me conmovió, ya que esta segura que sus hijos nunca podrán ser inscriptos, mientras ellos corren por una casa usurpada en la cual viven desde hace dos meses.

Susana Díaz me la presentó y de allí nos fuimos al Barrio Obrero, en Villa Adelina, donde conocimos a Jaiver de 19 años y su hermana menor de 15 años, ambos indocumentados.

Todos los días el sitio web del iadepp recibe consultas de personas indocumentadas de diferentes puntos del país, en su gran mayoría son referidas a jovenes de entre 16 y treinta años.

Cada uno guarda una historia con el mismo denominador, la soledad y la angustia de sentirse en la más absoluta soledad e impotencia para acceder a su DNI.

Miles de personas viven en esta situación y de los cuales es imposible conmensurar su pesar.

Hace falta juntar fuerzas, aunar esfuerzos colectivos y encontrar liderazgos políticos que comprenda la dimensión transformadora que esta lucha representa. Mientras tanto seguimos.

1 comentario:

Fabio Quetglas dijo...

Pana;

No estas solo.
Los indocumentados son el rostro del desmoronamiento del estado argentino. "Sin papeles pero de local".

Un país para todos nos convoca a pensar en una Ley y una política.

Ni siqueira pueden ser un número ... pero no sinterpelan.