Definitivamente la Argentina enfrenta un proceso de descomposición de la coalición Gobernante.
Las elecciones de Octubre del 2007, confundieron a más de uno. El oficialismo lograba un triunfo contundente, en relación con el resto de las fuerzas opositoras que dispersas habían licuado sus posibilidades. Pero medido en terminos generales, era pobre el sostén social de dicho triunfo.
De cada diez Argentinos, seis votaron en contra de la actual Presidenta.
Además, era necesario leer con detenimiento que los sectores sociales medios no acompañaban el proyecto político oficial, en particular su cotillón (supuestamente) hiper ideologizado. Entiendo, el supuesto, ya que no recuerdo en la historia reciente un movimiento político tan pragmático y carente de ideología, que no tenga en su manual solo frases hechas y cargadas de teología política. La retorica de los derechos humanos funcionó para confundir a unos cuantos desprevenidos, construyendo una suerte de nueva memoria colectiva que significa también, un borrón de una historia real, que es la historia del origen y el verdadero programa del poder K
El comienzo del derrumbre lo he señalado en un posteo anterior, es producto de la la voracidad del Gobierno por acceder a dinero que permita sostener su construcción de lealtades. En estas horas queda en evidencia que la ausencia de un programa ideológico en la acción de gobierno ha sido el causal de una crisis que nos anuncia tiempos peores.
1 comentario:
Es una crisis importante que dealguna menra desmitifica algunas cuestiones, me preocupa la institucionalidad y me persigo con la economía.
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